que-es-la-ansiedad

Cómo superar una ruptura

¿Cómo superar una ruptura amorosa?

Si esperabas una guía exacta o unos TIPS sobre cómo superar tu ruptura sentimental, sentimos tener que decirte que esto no existe, ojalá que así fuese. No obstante, sí que podemos ofrecerte información sobre qué emociones suelen aparecer tras una ruptura y algunas pautas que pueden llegar a ayudarte.

Normalmente, tras una ruptura amorosa suelen aparecer emociones desagradables (algo nada sorprendente) tales como: sensación de soledad, vacío, sensación de pérdida del sentido de uno mismo, angustia y una honda tristeza (o depresión). No deja de ser una situación de duelo.

Una ruptura puede llegar a ser una pérdida ambigua, sobre todo cuando no es de mutuo acuerdo, puede resultar complicada porque no hay un cierre. Lo que puede generar dificultades para comenzar a procesar el duelo y prolongar el proceso de “curación”, incluso dejarnos sin resolverlo. Además, ya no solo hemos perdido a la pareja romántica, sino también los sueños y expectativas que teníamos con respecto a ese futuro en pareja y, en algunos casos, la pérdida de otros vínculos cercanos derivados de la relación con los que no deseábamos finalizar.

Y aunque no hay una solución rápida para superar a alguien, hay cosas que puedes hacer para ayudarte en tu propio proceso de curación.

 

  1. Permítete sentir tus emociones

Date unos 10-20 minutos al día para conectar con aquello que puedas estar sintiendo con respecto a la ruptura. Te puede ayudar escribirlo en una nota. Cuando finalice ese tiempo, vuelve a tus actividades rutinarias. Además, pregúntate: “¿qué me puede ayudar ahora y me puede hacer sentir bien después?”. Quizás te apetezca realizar algo de deporte, charlar con alguien, escuchar música, darte un baño… Ten en cuenta que estas emociones desagradables aparecen porque te encuentras en una fase de la ruptura, es algo temporal. El objetivo no es superar la relación lo antes posible, es ser capaz de enfrentarte a estas emociones de manera gradual y consciente. Evita a toda costa tomar decisiones precipitadas acerca de tu futuro intentando huir de tu malestar actual. Escapar de las dificultades puede resultar un alivio temporal, pero no va a mejorar tu estado de ánimo de forma definitiva.

 

  1. Trata tu situación como si fuese una enfermedad física

Es decir, ten paciencia contigo mismo, igual que no te exigirías correr al 100% si acabas de pasar por una operación difícil de rodilla, no te exijas recuperarte a las dos semanas. Tómate tu tiempo y háblate con cariño. Intenta no juzgar tus sensaciones y tus comportamientos. ¿Cuánto tiempo tarda en pasarse el duelo de la ruptura? Esto es algo que no se conoce, cada persona es diferente y necesitamos tiempos distintos. Habrá días que te sientas peor, otros mejor. No es un proceso lineal de mejoría. Probablemente tengas pensamientos sobre lo ideal que era la relación y pensamientos sobre las dificultades que pasasteis. Tu mente irá saltando de unos a otros.

 

  1. Rodéate de buenos apoyos

Es importante que te rodees de personas en el momento de la ruptura y a lo largo de todo el proceso. Asegúrate de que tus necesidades de “apego” (de vincularte) están atendidas por otras personas. En caso contrario, es probable que busques a tu ex pareja para que las atienda. Muchas veces escuchamos frases como: “no quiero aburrir a mi amigo con este tema otra vez”, en estos casos, puedes intentar ir cambiando de “confidente” (pero, probablemente, sea más una percepción tuya que la realidad).

A veces, hemos perdido demasiado el contacto con algunas personas por habernos enamorado. En estas ocasiones, no hay nada mejor que una explicación clara y transparente sobre cómo nos sentimos y qué nos ha pasado: “sé que dejé de priorizar nuestra amistad mientras estaba en mi relación, y realmente lo lamento. Me encantaría tener la oportunidad de volver a conectar contigo si estás abierto a ello”.

 

  1. Mantén distancia con tu antigua relación

Para comenzar el duelo, tenemos que empezar a procesar que se ha roto la relación. Un buen inicio para esto es reducir la comunicación a sólo lo estrictamente necesario. No hay una recomendación única para cosas como borrar o no el número de un ex o bloquearlo en las redes sociales. Eso dependerá de los detalles de tu situación. Pero hay que ser conscientes de cómo te afecta mantener el contacto. Si la ruptura fuese una herida, después de atender el corte, el siguiente paso sería dejarlo en paz. Cada vez que te pones en contacto con tu ex, estás arrancando la costra, arrancar costras conduce a infecciones y cicatrices, y lo mismo ocurre con nuestra curación emocional.

En ningún caso resulta adecuado insistir en seguir debatiendo vuestra relación o las causas de la ruptura una y otra vez o, en el extremo opuesto, mantener vuestra relación como amigos desde el primer momento como si nada hubiera pasado. Independientemente de las causas de la ruptura amorosa, ambos tenéis que aprender a estar sin el otro. En caso de no hacerlo, existe el riesgo de establecer una relación perjudicial entre ambos, basada únicamente en la costumbre, los reproches y la dependencia, que impedirá que sigáis adelante.

      • Considera tener un intermediario si lo necesitas
      • Aleja cualquier recuerdo doloroso, guárdalo en una caja
      • No vigiles a tu ex
      • No te enrolles con tu ex (aunque suene evidente)
      • Cuando los recuerdos buenos te inunden, pide a un amigo que te de un “baño de realidad”
      • Escribe los motivos que te impulsaron a marcharte o que hacían que la relación no fuese bien

  1. Entiende tus emociones de soledad, inseguridad y culpa

Normalmente, tras una ruptura sentimental suelen aparecer emociones como soledad, inseguridad y culpa. Son emociones normales, especialmente en los primeros momentos, ya que estábamos acostumbrados a esa compañía y el apoyo que nos brindaba. Así mismo, la sensación de culpa viene acompañado por pensar que hemos abandonado al otro miembro.

Con respecto a esta última, una relación es entre dos personas, la responsabilidad nunca recaerá solo sobre uno de ellos. Reflexionar acerca de las propias conductas como forma de aprender de los errores puede resultar en cierto modo beneficioso. Sin embargo, esto debe realizarse con cierta moderación y siempre y cuando el fin de nuestra reflexión sea seguir adelante.

El sentirse abandonado o menospreciado por la persona que nos ha dejado puede generar grandes inseguridades. Creer que no se es lo suficientemente bueno o que acabaremos solos es también un pensamiento habitual. Una forma de combatir estas ideas podría ser preguntarnos: ¿y por qué estuvo conmigo?, ¿qué aporté yo en la relación?, ¿qué cualidades positivas me definen?

 

  1. Reconecta con las cosas que te hacen feliz

Te puede ayudar en estos momentos ocupar tu mente y activarte con nuevas (o viejas) actividades positivas. Quizá hayas dejado de hacer algunas mientras estabas ocupado en tu relación. De forma natural, nos alejamos de algunas actividades mientras salimos con alguien, y puede ser estimulante volver a ellas.

Ojo con llenarte de actividades de forma que ni siquiera conectes con lo que está pasando o con tener actividades que te desinhiban (todos tenemos al típico amigo que lo dejó con su novia y no paraba de salir de fiesta y emborracharse). Esta forma de pasar el duelo puede parecer que ayuda, sin embargo, lo que provoca es que no conectemos con la realidad de lo sucedido y enlentece el proceso de “curación”.

Tómate tu tiempo para procesar, reflexionar y decidir. En estos momentos intenta no tomar decisiones importantes drásticas. Simplemente, llena tu tiempo con cosas que te gusten cuando estés preparado para ello. Focalízate en generar nuevos recuerdos agradables.

  1. Considera ir a terapia

 Acudir a un psicólogo, en contra de lo que usualmente puede pensarse, no necesariamente significa que no puedas superarlo por ti mismo o que no tengas el apoyo de los que te rodean. Una situación de ruptura amorosa es muy estresante y provoca un cambio importante en tu vida, incluso puede llegar a provocar que experimentes un deterioro significativo en tu funcionamiento: no comer o dormir, faltar al trabajo o tener dificultades en él, cambios importantes en el estado de ánimo o la personalidad, o tener pensamientos intrusivos o suicidas.

Contar con alguien de confianza que sea neutral, objetivo y ajeno a la situación puede ser fundamental para comprender mejor lo que ocurrió. De esta forma, podrás asimilar por qué ocurrió, cómo llegasteis a ese punto, cuál fue el rol que tomaste en esa relación y cómo puedes aprender y crecer en futuras relaciones (ya sean de pareja o de otro tipo).

 

Quizás te pueda interesar echar un vistazo al artículo de dependencia emocional.